Termas de Papallacta, un lugar mágico para liberar el estrés y las preocupaciones
A 67 kilómetros de Quito y a una hora de recorrido se encuentra ubicado el Spa & Resort Termas de Papallacta, con una temperatura de las termas en su origen entre los 30° a 70°C, y la de las piscinas esta entre 38° y 40°C. Un complejo turístico de aguas termales que brinda a sus visitantes todos los beneficios e innumerables propiedades relajantes y curativas del agua. Es el único spa de Ecuador que ofrece salud a través del agua termal-minera, es medicinal debido a sus propiedades curativas y relajantes. Un lugar apto para todo tipo de público, desde familias, parejas y grupos de convenciones, ideal para los amantes de la naturaleza, para ir a relajarse y olvidarse del estrés laboral y de la ciudad.
El complejo no sólo ofrece este servicio a sus visitantes, también cuenta con hotel y cabañas. En el hotel hay 32 cómodas y agradables habitaciones que tienen calefacción y baño privado con tina, cinco de estas cuentan con hidro-masajes, su precio varía entre 145 y 180 dólares por noche. Por otro lado, las cabañas, con capacidad para seis personas, están diseñadas para quienes buscan más privacidad y que quieren compartir un ambiente familiar y acogedor, el costo promedio son 210 dólares.
Termas de Papallacta también cuenta con un Spa Termal, en el que se pueden realizar circuitos en cada piscina y recibir masajes con chorros de agua y burbujas de aire, la entrada para los adultos, es de 22 dólares y para los niños de 15 dólares; está el Club Termal, en el cual se le ofrece a sus clientes tratamientos corporales y faciales, baño turco, saunas, hidromasajes, área de meditación y descanso, y una isla de bebidas. Para los que quieren disfrutar de la naturaleza, existe un área protegida de 250 hectáreas en donde se pueden realizar caminatas por senderos ecológicos, y podrán apreciar la flora y fauna de la región.
Esta puede ser una buena opción, para las familias, amigos, parejas y para equipos corporativos que quieran realizar convenciones o disfrutar de un sitio exclusivo, qué mejor que hacerlo apreciando las aguas cristalinas de este mágico lugar. Descubrir los usos y efectos terapéuticos del agua termal, en un complejo turístico rodeado de naturaleza y de la mejor vista a 3.300 metros de altura sobre el nivel del mar, es uno de los mejores planes para un fin de semana. Un apacible y tranquilo lugar para liberar la mente del estrés y del caos de la ciudad, salir de la cotidianidad y revitalizar cuerpo y alma.
Foto: Cortesía